Sí, y lo hizo durante un partido. Un murciélago se coló en el pabellón de los Spurs, tuvieron que parar el partido y ahí es donde apareció Manu Ginobili como «salvador» matándolo de un certero manotazo. El bueno de Manu declaró al día siguiente en Facebook que no debería haberlo hecho, porque ahora está con tratamiento anti rabia; ha tenido que pincharse cuatro veces y dentro de un mes le tocará otras cuatro. Aproximadamente un 3-5% de los murciélagos son portadores de la rabia.